Xabi Alonso representa a ese prototipo del deportista que encaja en todas partes: Cae bien a los hombres y encandila a las mujeres

Representa a ese prototipo del deportista que encaja en todas partes. Cae bien a los hombres y encandila a las mujeres, que ven en él al hombre interesante por encima de la belleza. Elegante, seductor con clase, culto y aficionado a la lectura –durante la concentración de la selección en el Mundial se llevó con él unos cuantos-. Así es Xabi Alonso, el donostiarra que aterrizó hace casi tres años en Madrid y se hizo con la afición del equipo blanco.

Él es uno de los cinco deportistas elegidos para la nueva campaña de las fragancias de Hugo Boss. Junto a él, Mario Gómez, Assandro Matri, Gaël Clichy, Jakub Blaszczykowsky y Frank Lampard cambiarán sus camisetas de fútbol por otros atuendos que, al menos el jugador del Real Madrid le sientan igual de bien.

Con motivo de la presentación de la campaña publicitaria, el tolosarra, casado desde hace nueve años con Nagore Aramburu, se presenta ante los medios con la timidez que acostumbra pero una sonrisa de oreja a oreja. No es para menos; ha ganado su primera liga con el Real Madrid.

Durante la charla con los medios no dejan de lloverle los flashes y aguanta estoicamente. La educación que ha recibido se nota. Ni un alarde de divismo, nada de ínfulas. Ninguna palabra más alta que otra. Claro que previamente ya se nos ha informado que solo hablará sobre la fragancia, aunque siempre hay algún otro tema colateral que acaba saliendo.

Comienzan preguntándole por si se ha sentido cómodo posando ante la cámara. Sobran las respuestas. Dice que “muy bien”, y a juzgar por las imágenes no cabe duda. Lo siguiente es averiguar que olores son importantes para él. A lo que responde sin tener que pensar demasiado: “El del mar, a salitre”. Y de eso la culpa la tiene su pasado donostiarra: “He crecido en San Sebastián, he vivido mucho tiempo en la playa. Estoy muy bien en Madrid pero eso se echa de menos”, reconoce.

Ahora le espera un verano de trabajo, con la Eurocopa en camino, aún no sabe qué pasará con sus vacaciones, entre las que casi siempre se incluye como destino fijo la ciudad que le vio nacer. “Suelo pasar unos días en casa, pero ahora se acaba la liga y tenemos unos días de relax y nos vamos otro mes y pico a la Eurocopa, hay que cambiar el chip lo antes posible, pero me gustaría pasar unos días en casa, con los amigos que durante el año no veo tanto”.

Durante la preparación de la campaña aseguró que siempre intenta “ser profesional, estar centrado y ofrecer lo mejor de mí mismo”.  Comentaba además que “la persona que me ha inspirado ha sido mi padre (el exjugador Perico Alonso), me enseñó a ser humilde y a tomarme las cosas en serio”.  Sin duda toda una filosofía de vida que ahora él tiene que transmitir.

Asegura que “el mayor éxito de mi vida, ahora que soy padre, es educar a mis hijos para que sean buenas personas y darles la mejor educación que pueda”. Aunque sin duda, con eso del éxito sabe bien a qué se refiere, puesto que en el plano profesional la suerte le acompaña.

“El éxito es lo que todos buscamos pero no de cualquier manera, tiene que llevar una manera de comportarse, de llegar a la gente, eso es muy importante, porque está claro que los futbolistas tenemos una gran proyección y hay que intentar ser lo más respetuoso posible”.

Una filosofía de vida que se traduce en su día a día: “Intento ser feliz, disfrutar de la vida con lo que tengo, con la gente que me rodea, que la gente cercana a mi también pueda serlo”.  Lo dicho, un hombre elegante no solo por fuera, también por dentro.

Fuente: eldiariomontanes.es





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