Uno de los lugares más fascinantes del mundo y herméticamente cerrado al turismo es La Meca, la ciudad santa del Islam. Por desgracia, se trata de un destino inaccesible para gran parte de los occidentales ya que solo los musulmanes tienen acceso a él.
Sin embargo, hay maneras de viajar a Arabia Saudí y, con suerte, poder visitar La Meca. Todo un reto que tiene muchas papeletas para fracasar, pero del que muchos aventureros piensan que merece la pena intentar.
En principio solo pueden solicitar un visado de entrada en el país aquellos que, siendo musulmanes, vayan a realizar la peregrinación a La Meca o bien cualquier otra persona que por razones laborales o comerciales deban visitar alguna de las ciudades del país. Si eres extranjero no musulmán una buena opción es solicitar dicho visado si cuentas con una persona, ciudadano saudí de pleno derecho, que responda por ti y que se encargue de gestionar todas las gestiones necesarias. Una vez conseguido este permiso es necesario acudir a la embajada de Arabia Saudí en el país de origen para obtener el visado.
Importante: en Arabia Saudí no está permitido que las mujeres vayan solas a ningún sitio, por tanto deben estar acompañada en todo momento de su marido, algún familiar o alguien que responda por ellas.
Algunos personajes históricos han conseguido visitar La Meca sin ser musulmanes, como el aventurero hispano-marroquí Ali Bey o el explorador británico Richard Burton. Lo hicieron de la única maner aposible: haciéndose pasar por musulmanes y utilizando sus vastos conocimientos de la cultura islámica, incluido un dominio perfecto de la lengua árabe. Si no es este tu caso, mejor no intentarlo.
Fuente: TallerVirtual.com
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Etiquetas: Arabia Saudí, la meca, próximo oriente