Feliz, renovada, cargada de energía positiva y con una maleta llena de ilusiones, así afronta su nueva vida Elena Tablada. La atractiva diseñadora está radiante y muy contenta por haber conseguido pasar página, dejar atrás un capítulo de su vida y partir de cero. Mucha culpa de esa felicidad la tiene Daniel Arigita, el hombre que ha conseguido conquistar su corazón, pero también el hecho de que haya alcanzado un acuerdo con David Bisbal que les ha permitido derribar el muro que se interponía entre ellos. “David y yo hemos cerrado esa puerta que nos quedaba por cerrar. Ambos somos conscientes de que nuestra hija es un vínculo que nos unirá de por vida. Ante esto, la distancia no existe y solo cabe la cercanía para que esa preciosa niña crezca feliz”, confiesa Elena en una entrevista exclusiva que ha concedido a la revista ¡HOLA!. “No ha sido fácil llegar a este punto. Al contrario, ha sido duro, pero todo compensa por Ella”, añade.
Respecto a las razones por las que tomó la decisión de abandonar la casa que compartió con el artista almeriense, Elena reconoce que era algo “que tenía que hacer porque esa casa ya no la sentía como mi hogar”. “La felicidad de mi hija no depende de los metros cuadrados de la casa donde viva, sino del respeto que se tengan sus padres y del amor que se dé”, asegura la diseñadora, que también aprovecha para dejar claro que su nueva residencia está puesta a nombre de David Bisbal. “Legalmente, solo podré residir en ella hasta que nuestra hija sea mayor de edad, pero, quién sabe, la vida es muy larga y da muchas vueltas. En estos momentos soplan nuevos vientos y el sol brilla en el horizonte”, confiesa una ilusionada Elena respecto a su nueva vida al lado de Daniel Arigita, el empresario madrileño que le ha devuelto las ganas de creer en el amor. “Me siento afortunada de haber encontrado a Dani, que, por encima de todo, me da paz, amor y mucha alegría. Estar a su lado es un continuo aprendizaje de cómo ser feliz”, concluye.
Fuente: hola.com
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