En el pasado hubo tranvías de dos pisos en algunas ciudades europeas como Londres o Berlín. Precisamente fueron los británicos quienes los introdujeron en algunas de sus colonias, como Hong Kong. Hoy son uno de los medios de transporte más peculiares y utilizados de la ciudad, además de una atracción turística.
El tranvía se puso en marcha por primera vez en Hong Kong en el año 1904, y el primero de dos pisos fue introducido en 1912. Los primeros diseños eran algo diferentes, más pesados e incómodos, con la parte superior abierta. Todavía quedan algunos de estos para el disfrute de los turistas, aunque las mayoría de ellos hoy están cubiertos.
La gente de Hong Kong llama a sus tranvías con un cariñoso apelativo: ding-ding, por el sonido de la doble campana de anillo utilizada por los conductores para advertir a los peatones de su llegada.
Además de ser un sistema de comunicación eficiente y respetuoso con el medio ambiente, estos tranvías son también una de las estampas turísticas más típicas de Hong Kong. Viajar en el piso inferior del tranvía permite a los viajeros a tener una vista cercana de la vida local de la calle, mientras que desde los asientos del piso superior disfrutan de bellas vistas de la ciudad.
Además, sus tarifas son también bastante asequibles. No importa lo lejos que viaje, cada tranvía cuesta lo mismo: $ 2,30. Un sistema de transporte barato, eficaz y muy divertido.
Fuente: ViajarAsia.com
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