Así consta en una resolución de fecha 2 de marzo firmada por la fiscal jefe, Teresa Gisbert, en la que se designa fiscal instructor para que se encargue de las diligencias. De esta forma, Fiscalía admite a trámite la denuncia interpuesta el 10 de enero de este año por Pedro Peláez y Leonardo Scannone, propietarios de NT-K, en la que ponían de manifiesto las actuaciones llevadas a cabo por Apple en contra de sus intereses y en la que solicitaban que se estudiaran las incautaciones de mercancías en las que la mercantil norteamericana hubiera intervenido.
Según indicaban en la denuncia, las actuaciones de Apple estuvieron acompañadas de “una actitud manifiestamente intimidatoria” con el objeto de obligarles “a realizar actos en perjuicio de su patrimonio y en beneficio económico de la compañía Apple” y que podrían ser constitutivas de un presunto delito de extorsión contemplado en el artículo 243 del Código Penal español.
Para NT-K, la admisión a trámite de esta denuncia, “además de suponer un duro golpe a la imagen” de la compañía norteamericana “abre la puerta a la investigación de actuaciones presuntamente delictivas que la compañía Apple podría haber llevado a cabo en diversas incautaciones de mercancías en las que ha intervenido y de las que también podrían haber sido víctimas otras empresas españolas”, según ha apuntado en un comunicado.
Los denunciantes han expresado su “satisfacción” ante la actuación del ministerio fiscal ya que, según Peláez, “al margen del resultado final de las investigaciones, que la Fiscalía encuentre indicios de delito en la actuación de Apple resulta sumamente clarificador acerca de las prácticas de esta compañía y de su gabinete jurídico”.
Desde el blog de NT-K, ante la posibilidad de que Apple pudiera intentar derivar responsabilidades en sus representantes legales (Bird & Bird), se advierte de que han estado “informando a la compañía, de forma sistemática, y a través de buro fax (es decir, de forma contrastable) de cada una de estas actuaciones. Jamás se han puesto en contacto con nosotros”.
La denuncia de la mercantil valenciana contra Apple se produjo después de que el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Quart acordara en noviembre de 2011 el sobreseimiento provisional de la denuncia que presentó la compañía Apple contra ellos, al acusarles de haber copiado sus iPad.
La denuncia presentada por Apple se produjo después de que paralizase en la Aduana la entrada de unos ‘tablets’ de la compañía valenciana. De esta manera, se impidió la comercialización de estos artículos, lo que causó graves perjuicios a la mercantil.
EN PARALELO
Como consecuencia de esta paralización de los ‘tablets’, la empresa valenciana también realizó, paralelamente, actuaciones, y presentó una denuncia ante la Comisión Nacional de Competencia para alegar que sus aparatos ni tan siquiera utilizaban el mismo software, así que achacaba la actuación de Apple a cerrar el mercado e impedir la entrada a posibles competidores.
Fuente: elEconomista.es