Ayer me ocurrió algo que nunca antes me había pasado. Era domingo y suelo pasar las tardes de lluvia tirando en el sofá con mi MacBook Pro y la televisión puesta. A media tarde observo en la barra de herramientas superior que pone “La batería no está cargando”. Pensé que el cargador se habría estropeado y lo peor era que hoy tengo un curso de Redes Sociales y no podría darlo con mi super Mac. Desenchufé el cargador de la corriente, lo cogí de entre mis cojines, y estaba ardiendo… Llevaba horas entre cojines y mantas sin poder enfriarse con la temperatura de la estancia y dejó de funcionar. Lo dejé reposar unos minutos y volvió a funcionar. Así pues, tened cuidado de no tapar nunca vuestro cargador del portatil Mac, ni de ningún otro aparato, pues podrá dejar de funcionar o, lo que es peor, estropearse.
Artículos relacionados
Etiquetas: Apple, informatica, MacBook Pro