El reciclaje es un proceso que puede ser fisicoquímico o mecánico, el cual consiste en el sometimiento de un elemento ya usado a un tratamiento especial para la obtención de un producto nuevo. Esta explicación bien se puede considerar como muy ligera, pero nos otorga una idea por lo menos general del tema.
Ahora tengamos en cuenta los tipos de reciclaje que llegan a existir, estando en primer lugar la separación de residuos según el tipo de material de estos mismos. Esto más bien sirve de ayuda para que las compañías destinadas a la recolección de basura y reciclaje tengan un trabajo mucho más fácil y rápido, lo cual se traduce en mejores resultados. En diversas partes de las ciudades como por ejemplo la entrada de diversos establecimientos se puede encontrar tachos especiales destinados a este fin, donde cada color especifica el contenido a tener que depositar.
Otro tipo de reciclaje que se puede mencionar más bien guarda relación con la posibilidad de que nosotros mismos terminemos realizando una acción directa para poder darle un nuevo uso a los contenidos que comúnmente podríamos pasar a botar. Algo tan simple como poder guardar botellas descartables para guardar agua en vez de comprar tomatodos o bien guardar cualquier tipo de elementos dentro de las cajas de zapatos vacías, por poner un par de ejemplos del caso. Inclusive se puede ir un poco más a fondo y se puede rescatar las piezas todavía operativas de aparatos electrónicos para poder utilizarlas en otros o bien crear uno nuevo en base a la recolección de otras partes provenientes de distintos de estos.
Fuente: cultura10.com
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