Es «bastante amigo» de Rafa Nadal y, según los asiduos del circuito, «tan buena gente como él». El domingo pasado, David Ferrer (Jávea, 1982), sexta mejor raqueta del mundo y segunda de España, se tragó a duras penas las lágrimas tras perder su cuarta final (la más épica) contra el implacable mallorquín en el Conde de Godó. Pero en el momento de esta entrevista, en Barcelona, no ejercía de tenista, sino de modelo.
– Le noto una cierta elegancia inglesa…
– Me han elegido embajador de la firma británica Hackett. Sin ser muy coqueto, me gusta vestir bien.
– ¿Tiene flema alicantina?
– Todo se pega. En Jávea hay mucho turista inglés.
– No veo muy elegantes a los de las sandalias con calcetines.
– No sé, no me he fijado. Yo viajo mucho, ja, ja, ja…
– ¡Qué diplomático! ¿Esto de hacer de modelo es una salida laboral para cuando deje la raqueta?
– Por supuesto, el tenis son diez o doce años. Y yo acabo de cumplir 30 el 2 de abril.
– ¡Aries! ¿Cabezota o impetuoso?
– Soy más impetuoso que cabezota.
– ¿Posaría en ropa interior como Nadal?
– Si hay una buena oferta, no me importaría anunciar calzoncillos.
– Confiese. ¿Rafa le quitó el sueño antes del partido?
– No, no. Dormí perfectamente. Sólo me pongo nervioso diez minutos antes.
– ¿Y cómo combate los nervios?
– Hablando de tonterías con mi equipo técnico.
– ¿Cuánto le ha durado el disgusto de la derrota del Godó?
– Un día. El domingo estuve triste y mi cabeza no paraba de darle vueltas al partido, pero en el tenis no hay tiempo para lamentaciones. A la siguiente semana ya estás compitiendo.
– ¿Tiene algo que reprocharse?
– Nada. Di todo lo que tenía dentro, pero Rafa fue superior en los momentos importantes y por eso ganó.
– ¿Qué tiene usted que no tenga Rafa Nadal?
– ¿Yo? Tenísticamente, nada. Él lo tiene todo y cuando está bien marca diferencias. Jamás se ha visto ni se verá a un jugador con la fuerza mental de Rafa.
– Veo que adora a su verdugo. ¿Qué le dice su psicólogo?
– Nunca he tenido ayuda psicológica en el tenis.
– ¿Tampoco echa de menos a un Toni Nadal?
– No. Tengo a mi entrenador y a mi fisio, que es mi amigo; un grupo genial.
– ¿Su novia pertenece al mundo del tenis?
– Qué va. Ella es óptica.
– Una chica con buena vista.
– Yo sí que la tendré gracias a ella.
– Leo que lleva usted ganados más de 13 millones de dólares.
– Cuando juegas a tenis no piensas en el dinero. Y eso es bruto, hay entrenadores a los que pagar, gente alrededor… No tengo ahí guardados 13 millones. Ni tengo la vida resuelta.
– ¿Le choca lo de Arantxa Sánchez Vicario?
– Un poco sí. Duele ver que se lleva mal con su familia.
Fuente: eldiariomontanes.es
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Etiquetas: David Ferrer, entrevista