Ashton Kucther quiere ver las estrellas de cerca y no le basta con asistir a las galas de Hollywood. No, porque él quiere ver de cerca a las estrellas de verdad, las del espacio.
Por eso mismo ha pagado la friolera de 200.000 dólares para subirse al próximo transbordador espacial clase turista –que en verdad es primera clase–, el Virgin Atlantic Galactic.
Kucther se convierte así en el ocupante del asiento número 500.
El vuelo –de ida, y con suerte de vuelta– aún no tiene fecha de lanzamiento. Los encargados del vuelo aseguran que se trata de un viaje de placer sumamente seguro pues lo último que quieren es deshacerse de 500 personas adineradas.
Fuente: mascorazon.com
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