La cámara del iPhone no pasará a la historia como la mejor del mundo, pero queda claro que la popularidad de la misma es altísima y solo hace falta comprobar que en algunos servicios sociales la cámara teléfono es la cámara más usada.
Gracias a dicha popularidad el iPhone cuenta con multitud de accesorios enfocados especialmente para mejorada su uso como cámara, desde grips externos pasando por lentes que intentan imitar a una réflex. En Applesfera hemos probado uno de estos últimos y aquí tienes nuestras impresiones.
Si tienes un poco de experiencia en el uso de cámaras réflex seguro que sabes la importancia de un buen objetivo. Por eso la idea de que un objetivo para el iPhone de reducidísimo tamaño tenga una calidad aceptable es poco probable, por eso mismo mis impresiones sobre Olloclip han sido tan buenas.
Este accesorio, compuesto de tres lentes diferentes, tienes una calidad excepcional tanto en construcción como en funcionamiento. Sorprende ver que unas lentes tan pequeñas puedan dar tanta calidad y que, aún perdiendo cierto detalle, los resultados en un iPhone 4S son más que sorprendentes.
Olloclip: tres geniales lentes para el iPhone
Y es que, como comentaba, la calidad de las lentes es más que buena y aunque en algunas de ellas apenas son apreciables los efectos, en otras como el fisheye los resultados además de buenos son muy divertidos gracias a la cantidad de posibilidades de este tipo de lentes.
– Para fotografía. En el apartado fotografía nos encontramos con tres lentes que hacen los papeles de fisheye, macro y panorámico. Cada una de ellas ofrece un comportamiento diferente, mientras que el fisheye rebosa bastante calidad en las fotos finales (a excepción de los bordes con aberraciones y desenfoque, algo bastante normal en este tipo de objetivos) las lentes macro y wide-angle no resultan tan brillantes. Por un lado el wide-angle apenas mejora la lente del iPhone y aunque prometen un campo de visión de casi el doble que la lente del iPhone, en general diría que esa mejora no llega al 1.5X. El macro es un caso a parte, si bien la calidad de la lente es aceptable y los resultados buenos, su uso es bastante complicado debido a la iluminación casi perfecta que se necesita para conseguir buenos resultados.
– Para vídeo. Aquí ha sido donde, al contrario de lo que esperaba, he encontrado la mayor ventaja a estas lentes. Y es que el iPhone usa un recorte del sensor para realizar capturas de vídeo, esto hace que si (por poner un ejemplo) en foto tenemos un 28mm de focal, en vídeo contamos con un 40mm. Esto hace que algunas grabaciones en planos cercanos no queden nada bien. Gracias a estas lentes, sobre todo con el fisheye, conseguimos hacer uso de ese campo de visión extra que nos ofrecen de forma eficiente y de paso conseguir vídeos mejores que los que el iPhone realiza por defecto. La parte negativa se la lleva en el caso de que quieras hacer un vídeo con el efecto de fisheye, o cualquier otro, cosa que no vas a conseguir (al menos no de forma tan evidente que en foto) debido al recorte realizado en el sensor.
En cuanto al dispositivo en si, está construido de forma bastante correcta y si bien (a excepción de las lentes) el resto de equipo de plástico, la calidad y sensaciones son en general buenas. Lógicamente la parte perjudicada del iPhone radica en la ergonomía, algo que perdemos por completo al usar las lentes, las cuales se salen con bastante facilidad por lo que resulta más sencillo llevarlas separadas y usarlas únicamente en el momento en el que lo deseemos.
En general, un accesorio capricho con un precio de unos 60 euros aproximadamente, y que podremos comprar directamente desde la web del fabricante o en la Apple Store.
Fuente: applesfera.com