El actor Simon Baker se ha convertido en la cara más masculina de la famosa firma de relojes Longines
Aunque la trayectoria profesional de Simon Baker no ha tomado de verdad carrerilla hasta meterse en la piel del seductor e intrigante Patrick Jane en ‘El Mentalista’, lo cierto es que este australiano de 42 años se estrenaba en la gran pantalla a mediados de los años 90 con la muy reseñable ‘L.A. Confidential’. Una carrera lenta pero segura que ha llevado al actor a convertirse en una de las piezas clave de la parrilla televisiva, dentro y fuera de Estados Unidos.
Las claves de su magnetismo: su cabello rubio, su sentido del humor y su media sonrisa, que no sólo han conquistado a fieles seguidores y fans en todo el mundo, si no a los mismísimos responsables de Longines; la afamada firma de relojes acaba de presentar al actor como su nuevo Embajador de la Elegancia. Un título que, en sus palabras, casa a la perfección con los valores que Baker ha conseguido representar tanto en su vida profesional como personal.
Bajo la llamada ‘La elegancia es una actitud’, el guapo autraliano comparecía ayer por primera vez en su nuevo papel en el Prix de Diane Longines en Chantilly (Francia), donde la marca actúa como cronometrador oficial. Un día inolvidable en el que combinar deporte y elegancia entre coloridos sombreros y llamativos trajes, y durante el cual se presentó, además, uno de los nuevos modelos de la casa suiza, al tiempo que se celebraban sus 180 años de maestría relojera.
Simon Baker se une así a una selecta familia internacional de embajadores, que incluyen a la actriz británica Kate Winslet o a las leyendas del tenis Andre Agassi y Stefanie Graf. Los relojes de Longines se benefician de una solida experiencia deportiva como cronometradores de numerosos campeonatos mundiales y deportes ecuestres.
Fuente: hola.com
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