La Selección española ha logrado clasificarse tras vencer a Irlanda y Croacia y empatar con Italia
Los chicos que nos representan con su juego parece ser que son unos impresentables ante el fisco y el grito de ¡yo soy español, español! se queda solo para el estadio donde se juega la competición.
Se ha sabido que tras ganar el pasado Mundial de Fútbol de Sudáfrica cada jugador recibió la cifra de 600.000 euros en concepto de primas, importe del cual habría que descontar el 43 % de impuestos que exige la Hacienda española, pero ya se sabe que donde existe la ley, existe la trampa y estos chicos tan patriotas han ganado legalmente, pero han pagado con trampas.
Una ley, de esas hechas para los de siempre, les da la posibilidad de tributar en el país donde consiguieron el premio, en este caso Sudáfrica, donde el total a descontar es del 21 %, con lo cual cada jugador despistaría al fisco español la cantidad de 132.000 euros ¡Casi nada!
Mientras tanto el pobre parado español juntando céntimo a céntimo para comprarle a su niño la camiseta de La Roja y enseñarle a sentirse orgulloso de esos colores. ¡Pan y circo!
Fuente: marujeo.com
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