Finalmente ni Nokia ni Motorola han conseguido decantar las opiniones del ETSI (Instituto Europeo de Telecomunicaciones Estándar), y tras varios retrasos se ha decidido que la propuesta de tarjeta Nano-SIM de Apple se convertirá en un estándar siguiendo a la tradicional SIM y la más moderna Micro-SIM que vino de la mano del iPhone 4. Del comunicado oficial:
Será un 40% más pequeña que el diseño más pequeño que la tarjeta SIM con 12,3 milímetros de anchura, 8,8 de largada y 0,67 de grosor. Se puede empaquetar y distribuir de un modo retrocompatible con los diseños actuales de tarjetas SIM, y ofrecerá las mismas funcionalidades.
Apple soñaba con un mercado donde los móviles no necesitaran este tipo de tarjetas, pero la supuesta presión de las operadoras y el miedo a un móvil cuyo control absoluto viniera del fabricante lo impidieron. Este estándar de tarjeta Nano-SIM viene a ser un término medio, conservando lo que las operadoras quieren y al mismo tiempo ofreciendo justo lo que Apple necesita: más espacio en el interior de sus terminales móviles.
Vía libre para los diseños de futuros iPhones con tarjetas aún más pequeñas. Ahora sólo falta saber cómo vamos a poder coger estas tarjetas tan pequeñas y delgadas sin que se nos caigan al suelo y perderlas con tan sólo una pequeña brisa.
Fuente: applesfera.com