Los usuarios se han mostrado encantados ante las posibilidades de este dispositivos y ya se ha comenzado a compartir visiones sobre sus posibilidades. Al mismo tiempo, los primeros vídeos parodiando esta tecnología no han tardado en aparecer. Entre dichos vídeos destaca una sátira de cómo funcionarían las gafas si utilizasen Windows como sistema operativo.
Google sorprendió a la industria confirmando que trabaja en unas gafas de realidad aumentada. Lo cierto es que esta tecnología ha ido quemando etapas y ya está presente en un gran número de aplicaciones, como juegos navegadores o aplicaciones de servicio. La realidad aumentada ya es parte del presente, pero todavía no se ha explotado todo su potencial. Sin embargo, con Project Glass se acercaría considerablemente a esas capacidades que podría ofrecer la realidad aumentada.
El concepto de Google, presentado en vídeo, permite ver la idea de la compañía para el desarrollo de estas gafas. Se trataría de un dispositivo que permitiría a los usuarios acceder a widget y contenidos en forma de realidad aumentada. Indicaciones para encontrar una dirección, consulta de mensajes o incluso la realización de llamadas serían posibles gracias a este sistema.
Project Glass se ha ganado el reconocimiento de la Red, pero también ha cosechado críticas. El principal problema de esta tecnología para los usuarios es que podría interferir en otras actividades y crear situaciones complicadas. El hecho de que los usuarios estén atentos a la información que aparece ante sus ojos podría motivar distracciones y con ello provocar accidentes.
Teniendo presente esta crítica, no han tardado en aparecer vídeos que ironizan sobre el uso de estas gafas y sus posibles consecuencias. De todos los vídeos publicados en esta línea, destaca uno en el que se hace una sátira sobre las consecuencias de que las gafas de Google utilizasen como sistema operativo Windows. El estilo del vídeo imita al del original publicado por Google, donde un usuario utilizaba el dispositivo en su vida cotidiana.
Según el vídeo, si las gafas utilizasen Windows reproducirían algunos de los principales problemas del sistema operativo. Fallos a la hora de acceder a servicios, constantes solicitudes de confirmación y permisos y, sobre todo, la temida pantalla azul harían acto de presencia. Todas estas situaciones están recogidas en el vídeo, que en tono de humor asegura que las gafas, lejos de ser una herramienta útil para el usuario, sería todo un peligro para el mismo.
Fuente: elEconomista.es