Con este movimiento Microsoft ha adaptado la interfaz gráfica de la aplicación a la Retina Display del nuevo iPad. La descarga de esta nueva versión ya está disponible de forma gratuita desde iTunes.
La nueva versión 3.8 de Skype ya está disponible. Con la llegada del nuevo ‘tablet’ de Apple, y debido a su gran éxito en las primeras ventas, Microsoft no ha querido perder la oportunidad y ya ha adaptado Skype para el nuevo iPad, que se amoldará a la principal característica de este dispositivo, la Retina Display.
Sin embargo a pesar de que el nuevo dispositivo de los de Cupertino cuenta con una gran calidad de la pantalla, la cámara frontal con resolución VGA no ayuda a que los demás nos vean con mejor calidad. El nuevo iPad tiene una cámara delantera con bastante calidad pero la cámara trasera cuenta con menos resolución.
A pesar de esto el director de Marketing de EMEA en Skype ha publicado en el blog de Skype que la nueva versión de Skype 3.8 para iPad hace uso de la pantalla del nuevo iPad Retina Display, “por lo que Skype se ve aún mejor que antes”.
También ha aprovechado para pedir colaboración de los usuarios para que comenten acerca de su experiencia con la nueva aplicación de Skype. Donde se podrá informar de cualquier problema a través de una página Web que Microsoft ha habilitado de seguimiento de incidencias y una Red de Apoyo, desarrollado por la comunidad Skype.
El nuevo ‘tablet’ de Apple ha sido récord de venta mundial. Como no es para menos todos han querido adaptar sus aplicaciones a este dispositivo. Microsoft no ha anunciado otras funcionalidades de Skype para iPad con esta nueva versión, por lo que este lanzamiento de momento sólo va aprovechar las mejoras en la visualización que ofrece el nuevo iPad.
Skype 3.8 ya está disponible para su descarga a través de iTunes de forma gratuita. Se encuentra traducido al español, chino, danés, Neerlandés, Inglés, Finés, Francés, Alemán, Italiano, Japonés, Coreano, Noruego nynorsk, Polaco, Portugués, Ruso y Sueco. Requiere para su compatibilidad iOS 4.0 o posterior.
Fuente: elEconomista.es