La presentación que tuvo lugar ayer por la tarde en el Centro para las Artes Yerba Buena de San Francisco -donde la compañía ya mostró al mundo las dos generaciones previas de iPad- supondrá el segundo gran lanzamiento para el presidente ejecutivo Tim Cook tras el iPhone 4S, que presentó en la sede de la compañía el año pasado.
La primera reacción ante ese modelo de iPhone fue de decepción, ya que fue percibido como una actualización de software, pero “Siri”, su tecnología de asistencia personal dotada de voz, ayudó a que se vendiera muy bien.
Con él probablemente estarán el responsable de marketing de Apple Phil Schiller, el encargado de los servicios de Internet Eddy Cue y al jefe de software Scott Forstall, el personal habitual en los grandes lanzamientos tras la muerte el año pasado del fundador de la compañía, Steve Jobs.
La compañía, famosa por mantener en secreto sus movimientos, no ha dicho cuáles serán las novedades del nuevo producto, aunque habilitó las especulaciones con una misteriosa invitación al evento en la que se ve parte de una pantalla de iPad y se lee “Tenemos algo que usted verdaderamente tiene que ver. Y tocar”.
Fuente: eleconomista.es